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Castillo de Chambord

El Valle de Loira es tierra de castillos y jardines. En esta ocasión estamos en la zona central de la región y en uno de sus castillos más famosos. Su jardín no es de los más espectaculares de la zona, pero si lo es el bosque que lo rodea, que si en otras época servia de zona de caza a reyes y nobles, ahora permite a todo aquel que se acerque por el lugar a dar largos paseos y disfrutar de su paisaje.

Actualmente forma parte del conjunto de castillos del Loira declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco como “Valle del Loira entre Sully-sur-Loire y Chalonnes”, en el año 2002. En 1915 el gobierno francés expropia la propiedad y desde entonces es de uso publico.

Es el castillo más grande del Loira y se construyo como pabellón de caza de Francisco I. Nos encontramos con un castillo renacentista en el que se mezclan las formas tradicionales medievales con las estructuras clásicas italianas. Su construcción se inicia en 1519 en el corazón de las tierras pantanosas de Sologne. Lo más famoso de este castillo es su escalera, que se considera una obra maestra del renacimiento francés y se cuenta que su diseño se debe a Leonardo da Vinci, muy apreciado por Francisco I. Se trata de una escalera de tramos dobles en forma de espiral, con un hueco como núcleo entre ambas, de forma que desde cada lado se ve quien va por la otra escalera, sin llegar a cruzarse. En la ultima planta encontramos unas fantásticas terrazas que permiten apreciar el paisaje que rodea el castillo y las ocho torres rematadas por altos tejados de pizarra. Es un castillo grande y frio que cuenta con 440 habitaciones, 365 chimeneas, y 84 escaleras. Cuentan que los baños se encontraban en la ultima planta. 

Fue Luis XIV quien emprende obras de saneamiento para dotar al castillo de un marco paisajista a la altura de su arquitectura, para ello acondiciona los jardines del norte y del este que han llegado hasta la actualidad. Luis XV en 1734 fueron reacondicionados con paseos de arboles y bosquetes. Los parterres se mantienen hasta 1930 con formas muy parecidas a las del siglo XVIII. En los últimos años han sufrido una nueva reforma y desde la primavera de 2017 se puede disfrutar de su entorno. Una recuperación que ha supuesto 16 años de estudios. El resultado ha sido: 6.5 hectáreas ajardinadas; 44.000 m² de paseos de gravilla; 32.500 vegetales; 18.000 m² de césped; 800 árboles plantados; 5 meses de obras; 3,5 millones de euros de presupuesto; más de 100 personas movilizadas.